- Estado de ánimo irritable o bajo la mayoría de las veces.
- Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño.
- Cambio grande en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso.
- Cansancio y falta de energía.
- Sentimientos de inutilidad, odio a sí mismo y culpa.
- Dificultad para concentrarse. Movimientos lentos o rápidos.
- Inactividad y retraimiento de las actividades usuales.
- Sentimientos de desesperanza y abandono.
- Pensamientos repetitivos de auto destrucción.
- Pérdida de placer en actividades que suelen hacerlo feliz, incluso la actividad sexual.
Algo muy importante: La depresión es sólo una conducta, no es tu identidad, no te define. Así que; trátala como una conducta.
Evita decir "estoy deprimido" o "tengo depresión", en su lugar te sugiero decir "tengo una conducta depresiva" o mejor aún "mi mente tiene una conducta depresiva"
Para empezar a solucionar la conducta depresiva, te propongo las siguientes terapias.